Hoy celebramos el Día por el #Derecho de las Mujeres a un #Aborto Seguro.
En Senegal, la interrupción voluntaria del embarazo está prohibida por ley, y esto empuja a las mujeres a hacerlo de manera clandestina, poniendo en riesgo su vida.
Estas intervenciones de riesgo son la causa de entre el 8 y el 13% de la mortalidad materna.
En Fundación Xaley llevamos a cabo formaciones en Salud Sexual y Reproductiva. Estos conocimientos evitan embarazos no deseados y salvan vidas, pero es fundamental instar a los gobiernos, especialmente al gobiernos de Senegal a comprometerse a cumplir el protocolo de Maputo que firmaron en 2005.
El Protocolo de la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos relativo a las Mujeres en África (Protocolo de Maputo), ratificado por Senegal en 2005, establece que los estados deben “proteger los derechos reproductivos de las mujeres, particularmente permitiendo el aborto seguro, en casos de agresión sexual, violación, incesto y cuando el embarazo pone en peligro la salud física y mental de la madre o la vida de la madre o del feto ”.
Senegal también ha ratificado la Convención contra la Eliminación de la Discriminación contra de la Mujer (CEDAW) en 1985, que garantiza en su artículo 12 el derecho de la mujer a servicios médicos, incluidos los servicios de planificación familiar. Interpretando esto disposición, el Comité de la CEDAW recomienda «enmendar la legislación que establece el aborto delito y eliminar las penas impuestas a las mujeres que abortan ”.
Los cuerpos de las niñas y jóvenes embarazadas que no pueden someterse a una interrupción voluntaria del embarazo sufren graves daños. Entre 2013 y 2014 el Centro de Orientación Infantil y Familiar contabilizó 420 casos de abuso sexual a menores entre 7 y 14 años. Alrededor del 30% de las mismas resultaron embarazadas y entre el 10 y 15% debieron ser sometidas a cesáreas debido a su corta edad. “El embarazo y el parto implican graves riesgos para la vida y la salud de las niñas que no han terminado su crecimiento y las cesáreas están bien lejos de eliminar los riesgos. Los embarazos no deseados acarrean consecuencias, en especial psicológicas, que resultan desastrosas para las mujeres y jóvenes en general”, afirmó Selma Hajri, médica, miembro de la delegación de la FIDH.
Estos son los datos que ofrece la Organización Mundial de la Salud sobre el aborto: